Ricos, negocio e impuestos

Millonarios en favor de la “justicia fiscal”

10·01·23

“Hay gente pa’to”, dicen que dijo un famoso torero. Políticos que piden bajar impuestos, políticos que piden subirlos. Una reciente encuesta privada señalaba que más de un sesenta por ciento de los españoles pagaría más impuestos, la mayoría para destinarlos a mejorar la sanidad pública. Aunque las personas se suelen agrupar por similitudes, siempre surge algún discrepante dentro del grupo. Es el caso de un futbolista gallego que, a pesar de su cotización como goleador en la máxima categoría, ha renunciado al dinero y a su cotización y catalogación y ha descendido dos divisiones en las categorías futbolísticas, incluso a costa de su propio dinero, para incorporarse al club de sus amores, el Deportivo de A Coruña, el “Dépor”. Lucas Pérez rechaza el negocio y apuesta por el fútbol. Marlene Engelhorn, una vienesa muy rica, de treinta años, heredera de más de 4.000 millones de euros, manifiesta reiteradamente que los ricos deben pagar más impuestos.

Warren Buffett, uno de los multimillonarios que anualmente ocupan los primeros puestos en la lista de las mayores fortunas del mundo que publica la revista “Forbes”, ya hizo una propuesta similar hace más de una década. “Dar a los demás hace tu vida más rica”, manifestaron Bill y Melinda Gates cuando se propusieron recaudar 600.000 millones de dólares entre los grandes acaudalados de Estados Unidos para destinarlos a causas humanitarias. Buscaban convencer a otros cuatrocientos multimillonarios para que donasen la mitad de sus ganancias con el fin de destinarlas a esas propuestas humanitarias. Con su llamada “The Giving Pledge” (El compromiso de donar) perseguían poner en práctica una decisión tomada anteriormente cuando Buffett y Gates iniciaron una ronda de negociaciones con personalidades, entre ellas David Rockefeller y George Soros, para hacer real la iniciativa.

La joven austroalemana, que estudia Lengua y Literatura en la Universidad pública de la capital austriaca, se ha desenvuelto en un escenario privilegiado y ha estudiado en las mejores escuelas, pero considera “lo sesgada que está la economía”. Descendiente de Friedrich Engelhorn, fundador en el año 1865 de la que hoy es la multinacional química alemana BASF, ha vivido siempre en la abundancia. Sin embargo, el estudiar en la Universidad pública le estimuló una nueva inquietud social y empezó a trabajar en pro de los derechos de los homosexuales y a luchar contra las desigualdades sociales; entró en contacto con Patriotic Millionaires o Resource Generation, movimientos de ricos norteamericanos que piden una tributación mayor, y últimamente contribuyó a crear Tax Me Now, “una iniciativa de gente rica empeñada en lograr justicia fiscal en Alemania, Austria y Suiza”, según explican en su página web, mientras solicitan firmas para conseguir una profunda reforma tributaria.

Marlene Engelhorn rechaza la filantropía y dice que se necesita “un cambio estructural” en vez de fundaciones, y se ha comprometido a traspasar el 90 por ciento de lo que herede al Estado, pero nunca a “un gobierno que no aplique impuestos sobre la riqueza”, según manifestó a “The New York Times”. El origen de la herencia de la joven vienesa proviene de un antecesor suyo que trasladó la empresa familiar fuera de Alemania, la vendió a unos laboratorios por once mil millones de dólares y la Hacienda germana no cobró nada. Ahora los medios hablan de sarcasmo cuando ella sugiere que así repara la conducta de su pariente.

En fin, no creo que Buffett, Gates, Soros y otros notables multimillonarios sean sospechosos izquierdistas aunque planteen fórmulas contrarias a gran parte de las formaciones políticas conservadoras, en la oposición, en España. Esos multimillonarios rechazan el engaño de que presionar más a las familias ricas dañe la inversión. Publicaron un artículo en el diario neoyorquino que titularon “Dejen de mimar a los superricos”.

Publicado en LA NUEVA ESPAÑA el martes 10 de Enero de 2023

https://www.lne.es/opinion/2023/01/10/ricos-negocio-impuestos-80949539.html

Restos dictatoriales que permanecen

FERNANDO GRANDA

De los bienes artísticos incautados por el franquismo y por los nazis

29·12·22 

La Biblioteca Nacional está realizando un estudio, y previsiblemente un inventario, sobre los bienes, literarios y artísticos, incautados por el franquismo. Las cifras que se manejan superan los 6.000 obras expoliadas y su conocimiento exacto se pondrá a disposición pública en las próximas semanas. El trabajo se realiza ocho décadas después de que libros, dibujos y grabados fuesen confiscados entre los años 1941 y 1943. También, según informaciones publicadas por eldiario.es, el Museo del Prado ha reconocido tener una serie de cuadros “robados por el franquismo a sus dueños”. Estas instituciones españolas no representan algo extraordinario y único en el reconocimiento de relaciones con lamentables pasados. Informes publicados por diarios estadounidenses, entre ellos “The New York Times”, están sacando a la luz quiénes mantienen nombres, becas y otras conexiones relacionados con el régimen nazi.

Así, la prestigiosa Universidad de Harvard reconocía la última primavera su pasado relacionado con el nazismo. También la de Stanford, al igual que la NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, la agencia del gobierno estadounidense responsable del programa espacial civil), el mismo Ejército de Estados Unidos y otras instituciones estadounidenses mantienen su reconocimiento a antiguos personajes implicados en el régimen nazi. “Creo que tenemos la responsabilidad moral de hacer todo lo posible para atender los persistentes efectos corrosivos de esas prácticas históricas en las personas, en Harvard y en nuestra sociedad”, escribió Lawrence Bacow, presidente de esta universidad, cuando informó a la comunidad sobre actividades de su pasado.

Hace unos tres años el presidente Bacow creó un comité, con representantes de todo el campus, para que investigaran los posibles vínculos de Harvard con la esclavitud. Tras un riguroso estudio ahora sale a la luz que la Universidad y su personal esclavizó al menos a 70 personas desde su fundación en 1636 hasta la prohibición de la esclavitud en el Estado de Massachusetts en 1783. En el informe se señala con bastante detalle quiénes fueron los esclavos, de dónde procedían y quiénes se beneficiaron de la situación. Aunque con este reconocimiento no despeja la situación actual ya que hoy día mantiene una beca, con el nombre de Alfried Krupp, un criminal de guerra nazi que sostuvo su imperio industrial con cerca de 100.000 trabajadores forzados. Tenía una fábrica construida por esclavos –prisioneros de guerra, presos de campos de concentración, incluso niños– en Auschwitz. Décadas después de la Guerra Mundial Harvard creó la Cátedra de Estudios Europeos de la Fundación Krupp, así como la Beca de Investigación de Disertación de la Fundación Krupp, con los dos millones de dólares (unos 12 millones de hoy) con fondos de la fundación.

Más conocida es la implicación de personal nazi de la agencia espacial norteamericana, la NASA, ya que el antiguo oficial de las SS alemanas, Wernher von Braun, fue presentado como un genio de la ingeniería y las matemáticas, siendo la cabeza visible del programa espacial norteamericano, el contrapeso a los autores de la carrera espacial de la Unión Soviética (operaciones conocidas como “Paperclip” y “Osoaviakhim”, respectivamente), entre cuyo personal también había técnicos alemanes. Von Braun fue considerado un héroe en la construcción de las naves que llevaron astronautas de Estados Unidos a la Luna. Otra beca con su nombre continúa siendo concedida por la agencia que ahora prepara nuevos astronautas para próximos vuelos por el espacio. Von Braun y Kurt Debus fueron quienes proporcionaron a Hitler los misiles balísticos V-2 con los que bombardeó constantemente Londres y la neerlandesa Amberes. Y el US Army mantiene en la base Redstone Arsenal, en Huntsville (Texas) un complejo de edificios denominado Von Braun (un “empleado del Departamento de Artillería Alemán”, el centro donde se desarrollaron los V-2).

Precisamente estos pasados días, Irmgard Furchner, una mujer alemana de 97 años, ha sido condenada por un tribunal regional de ITzehoe, al noroeste de Hamburgo, a dos años de prisión –que por distintas razones no cumplirá– como culpable de complicidad en 10.505 asesinatos en campos de concentración nazis durante la II Guerra Mundial. La que fuera taquígrafa y mecanógrafa del comandante del campo de concentración de Stutthof, fue acusada de haber “ayudado e incitado a las personas al mando del campo en el asesinato sistemático de los encarcelados allí, entre junio de 1943 y abril de 1945”.

Publicado el jueves 29 de diciembre de 2022 en La Nueva España

https://www.lne.es/opinion/2022/12/29/restos-dictatoriales-permanecen-80474898.html
https://www.lne.es/opinion/2022/12/29/restos-dictatoriales-permanecen-80474898.html

TRIBUNA

FERNANDO GRANDA

La Felguera, gran centro cultural y minerosiderúrgico

El Valle merece un museo a la altura de su rico pasado industrial

16·12·22 

La Felguera fue un importante centro cultural y un núcleo minerosiderúrgico en el ranking europeo. Lo que hoy es una población casi nueva, con renovados barrios, población joven e importante nicho de desempleo, antaño fue un clúster que destacó en Europa. Tanto fue así que Unesco señaló a La Felguera en 1961 como el “kilómetro más culto de Europa”.

Leo en LA NUEVA ESPAÑA que a Superman le ha salido competidor por el título de “hombre de acero”. Se llama Jerónimo Blanco, vive en La Felguera y está jubilado, pero durante las próximas semanas se convertirá en un superhéroe, “Supersiderúrgico”. Su meta: lograr la ampliación del Museo de la Siderurgia de Langreo. Para ello se manifestará, enfundado en un traje plateado que protege del calor radiante, frente a los ayuntamientos de la comarca, la sede del Principado en Oviedo y el Congreso de los Diputados en Madrid. Su rival: la “desidia de los políticos” que, según relata, han hecho caso omiso de sus peticiones hasta ahora.

Esto es un perfecto resumen de la situación actual. Apoyo a Jerónimo, a quien personalmente no recuerdo, porque lo que podría ser un magnífico museo no pasa de un paseo por la nostalgia. Al menos esa fue mi impresión en mi última visita al MUSI.

Negar u olvidarse de la historia es decir que “el tiempo pasado fue mejor”. Y no es eso. La Felguera tiene una historia que merece la pena recordar como cimiento para construir un gran futuro. Porque la gloria no llegó gratuita. La vida fue difícil en el alle. Lo explicamos hace unos meses en el artículo “Sobrevivimos en aquel Langreo” (https://www.lne.es/opinion/2021/10/05/sobrevivimos-langreo-58017885.html). Pero el MUSI no refleja esos años industriosos que llevaron a La Felguera a ser un referente en Europa.

Jerónimo Blanco, el “Supersiderúrgico”, como cabeza visible de la asociación Musi-Pedro Duro, que estudia llevar a cabo movilizaciones para exigir lo que sería la segunda fase del Museo de la Siderurgia, reivindica un museo digno de lo que fue un centro neurálgico de la industria y la minería española, que superó numerosas dificultades, años de leyenda negra sobre conflictividad, pero que se sobrepuso hace décadas a su precario estado y fue considerado el pueblo más culto de Europa por su muy intensa actividad cultural.

Aquel pequeño Turiellos en el que Pedro Duro Benito instaló la gran industria siderometalúrgica, aquella Mesopotamia entre Nalón y Candín fue un núcleo donde nacieron también empresas químicas y complementarias de la industria pesada, minas de carbón y otros minerales… donde se llevaron a la práctica pioneras acciones sociales como escolarización y sanidad gratuitas, donde se promovieron certámenes culturales como el veterano Concurso de Cuentos, el pregón literario, el Concurso Internacional de Cortometrajes y Documentales…Y donde se celebraba durante décadas el Certamen Provincial de Trabajo en el que se exponían curiosas obras de los trabajadores, artísticas y prácticas, que bien podrían ser objetos de exposición en ese Museo de la Siderurgia que hoy ocupa un edificio emblemático de lo que fue una gran industria.

Publicado el viernes 16 de diciembre en LA NUEVA ESPAÑA (EDICIÓN DE LAS CUENCAS)

https://www.lne.es/cuencas/opinion/2022/12/16/felguera-gran-centro-cultural-minerosiderurgico-80021709.html

Un pecaminoso mechón de su cabello


FERNANDO GRANDA

La lucha de la mujer por la igualdad de derechos

12·10·22

El matriarcado, pienso, debió ser una leyenda histórica o un bulo universal. Y el gineceo griego una rareza extinguida. Parece imposible que, a pesar de los avances de la Humanidad en ciencia, educación, tecnología, en ética e ideología, las mujeres sigan perseguidas en este siglo XXI. La mitad del género humano se ve relegada por la otra mitad sin ningún argumento racional. Sobre todo en teocracias, en territorios donde gobiernan ejecutivos de inspiración dogmática. Un mechón de cabello al descubierto puede ser causa de represión y muerte.

El pelo, la cabellera femenina, parece que ha de estar para los vigilantes de la moral obligatoriamente recogido, ocultado a la vista general ya sea la mujer creyente o no, practicante o no, integrante o no de una orden religiosa. Eso bajo regímenes tolerantes. Porque en los países de imposición religiosa además del cabello han de tapar su rostro y otras zonas del cuerpo que las distingan de los hombres.

No ha transcurrido tanto tiempo en el que las mujeres se debían cubrir la cabeza para entrar en una capilla o en una iglesia aunque no se celebrase culto en ellas. La mantilla era una pieza fundamental y casi imprescindible en el bolso femenino. En los países de tradición católica era obligatoria para acudir a una ceremonia o para realizar una visita de carácter turístico o de admiración artística. Y en los púlpitos se predicaba, entre otras prohibiciones, la recriminación a la mujer que no se cubriese la cabeza de alguna manera.

Si nos referimos a regímenes políticos de inspiración –u obligación– religiosa islámica el imperativo es radical. Y el planeta está lleno de estos sistemas que priorizan sus leyes en favor de una religión a los derechos de las mujeres. Hoy se habla de las protestas que las valientes féminas iraníes llevan a cabo en las principales poblaciones regidas por gobiernos de los ayatolás chiitas. De las numerosas detenciones –y manifestantes muertas/os– en Teherán y otras ciudades de Irán. Y se recuerda el régimen talibán en Afganistán, donde la mujer tiene menos derechos que algunos animales.

Sin embargo, no son éstos los únicos países donde no son consideradas las mujeres como personas. Podría considerarse que la razón está en que la persecución femenina se debe a un atraso de civilización, con lo que esto supone tras muchos miles de años de existencia de la humanidad. La falta de derechos de la mujer se extiende por una gran parte de la geografía mundial. Prácticamente en todos los territorios donde la religión entra en política, donde la política depende de las creencias… Irán, Afganistán, Arabia, los Emiratos Árabes Unidos, Yemen, Israel, Egipto y un largo etcétera. Es decir, gran parte de África y de Asia, ya sea por exigencias del Islam o de otras creencias primitivas.

Los gestos que se vienen observando en las últimas semanas quizá puedan paliar esta discriminación –miles de mujeres manifestándose en las ciudades irquíes, en capitales europeas, artistas españolas cortándose un mechón, una joven iraní pidiendo acudir al video #mahsaamini que se ha hecho viral…–, el de la eurodiputada sueca Abir Al-Sahlani, de origen iraquí, que se cortó el pelo en pleno discurso en el Parlamento Europeo, mientras pedía a gritos “vida, libertad”, jóvenes dándose tijeretazos en la cabeza ante los antidisturbios, la amenaza de Josep Borrell de aplicar sanciones a Irán por parte de la Unión Europea… Son imágenes que dan la vuelta al mundo pero que hacen poca mella en esos vigilantes de la moral que se muestran por el planeta. El machismo está arraigado en las sucesivas civilizaciones y no desaparece con la difusión de su horror. Vean el ejemplo de los estudiantes –ojo, universitarios– de un colegio mayor madrileño, que han sustituido las prohibidas novatadas por la escenificación de su machismo indisimulado. Todo parece seguir igual, los asesinatos de mujeres por ser mujeres son constantes en el mundo.

A pesar de aquel mechón que Salvatore Adamo veneraba como “un recuerdo fugaz de una noche de amor”, un mechón mal peinado fue la causa de la represión de una policía de la moral que llevó a la muerte a la joven Mahsa Amini en una comisaría de Teherán.

Publicado el miércoles 12 de octubre de 2022 en LA NUEVA ESPAÑA

https://www.lne.es/opinion/2022/10/12/pecaminoso-mechon-cabello-77144626.html

Trabajar menos horas para vivir mejor

Las propuestas laborales del alcalde de Valencia y el Ministerio de Industria

28·09·22

El alcalde de Valencia propone aprovechar cuatro lunes festivos de la próxima primavera para probar la semana laboral de 32 horas. La propuesta de Joan Ribó la intentaría celebrar entre las fiestas de Semana Santa y el Primero de Mayo, en abril de 2023. “Queremos ver qué le pasaría a la ciudad si se instaurara una jornada de 32 en cuatro días en la semana”, ha dicho a los medios el edil, quien ya se comprometió a probarlo en el Congreso Internacional sobre la Semana Laboral de cuatro días que organizó el servicio de empleo de la Generalitad Valenciana el pasado mayo.

Trabajábamos seis días y era la jornada semanal habitual en España y la mayor parte de Europa en la segunda mitad del siglo XX. Negociaciones y convenios fueron reduciendo la semana laboral y el estándar generalizó en el mundo occidental las cuarenta horas en la mayoría de los trabajos. Había variedad de turnos, horarios y libranzas y se avanzaba en la reducción en favor de la ansiada conciliación familiar. De la labor en dos bloques horarios se fue, al menos en muchas profesiones y trabajos, a la jornada intensiva o continua. De la jornada por horario a la por producción, por resultados. Sigue habiendo jornadas laborales de diez o más horas, de dudosa legalidad, pero la tendencia va hacia bajar de las ocho y de los cinco días que se trabajan hoy en Europa en la mayoría de las profesiones.

Ya hace una década un hospital de Gotemburgo y el Ayuntamiento de Estocolmo hicieron pruebas para reducir la jornada laboral de sus empleados. Y es que Suecia es uno de los países que más innova en ese terreno. La empresa automovilística de mayor producción en Japón ya practica desde hace años la semana de cuatro días. En Francia hace lustros que la implantación de la jornada semanal de 35 horas ha originado una controversia nacional con idas y vueltas. En España el partido Más País, que lidera Íñigo Errejón, propuso hace meses la implantación de la semana de cuatro días laborales. Recientemente el empresario mexicano Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo según la revista “Forbes”, propuso la semana laboral de tres días, con jornadas de 12 horas de trabajo, pero estableciendo la jubilación a los 75 años. Como vemos, son distintas ideas para trabajar para vivir y no vivir para trabajar.

La trayectoria de la semana laboral fue estudiada hace una docena de años por el Institut National de la Statistique et des Études Économiques (INSEE) francés. En el informe “Sesenta años de reducción del tiempo de trabajo en el mundo” señalaba ese organismo cuánto trabajaban los europeos, destacando entre los que más a los españoles y entre los que menos los neerlandeses. Nos acompañaban en el furgón de mayor tiempo laboral los coreanos junto a japoneses y estadounidenses. En los sesenta años que separan 1950 de 2010 los holandeses redujeron su jornada anual en 600 horas mientras los españoles lo hicimos 275. Y hace quince años, según el citado instituto francés, si los habitantes de los Países Bajos pasaban 1.413 horas en el trabajo, los españoles lo hacíamos 1.775. La media europea había descendido unas 360 horas en esos años entre mediado el siglo XX y la primera década del XXI.

Los argumentos para buscar la reducción del trabajo varían según los puntos de vista, aunque en todos se busca no bajar la productividad. En algunas pruebas se mostraron mayores costos, pero en la mayoría se destacó el menor absentismo, la mejora de la salud de los trabajadores, a la vez que disminuye la rotación. En las empresas suecas que emprendieron este camino se constató que refuerza la creatividad del empleado y puede aumentar la productividad en un nivel que compensa el precio de contratar a más personal. En el hospital de Gotemburgo se crearon 17 nuevos empleos de enfermería. Fuentes patronales suecas reticentes a la reducción temían que ésta les obligaría a elevar costes para nuevos contratos, pero en muchos casos no fue necesario “porque todo el mundo trabaja con mayor eficiencia”.

Cuando el pasado junio el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo iniciaba el trámite para que 150 empresas prueben el sistema de los cuatro días sin rebaja salarial, que Más País exige para aprobar los Presupuestos Generales del Estado, trabajadores de distintas empresas que ya practican esa reducida jornada mostraban su alegría por la iniciativa. Puede ser una medida que impulse otra reducción, la de la brecha salarial entre hombres y mujeres.

Publicado el miércoles 28 de septiembre en LA NUEVA ESPAÑA

https://www.lne.es/opinion/2022/09/28/trabajar-horas-vivir-mejor-75978365.html

Melilla y su problemática frontera

Una avalancha que acaba en tragedia mortal

Los seis o siete fortines militares que rodeaban la ciudad de Melilla eran protegidos por pelotones de guardias. Oficialmente la cautela tenía por objeto impedir el paso clandestino desde Marruecos a España. La epidemia de cólera que había sufrido y soportaba aún el país vecino era la causa de la especial vigilancia de los límites entre ambos territorios. El resguardo de los márgenes entre los dos países corría a cargo del Tercio Gran Capitán, Primero de la Legión. Cada veinticuatro horas los legionarios renovaban el personal en dichos fortines. No recuerdo detenciones, si el trapicheo, la dejadez y la corrupción, los varios pasos clandestinos y presuntamente consentidos.

Los tiempos han cambiado tanto que los pequeños edificios militares de hace cincuenta años son una reliquia. Las alambradas y “tierras de nadie” que rodean la ciudad autónoma los han hecho obsoletos. Y la vigilancia corre a cargo de otras fuerzas del orden. La paulatina globalización atrae a quienes sufren la miseria y una precariedad vital de tal forma que hoy son miles las personas que se acumulan en los aledaños de la líneas fronterizas con intención de traspasarlas y llegar a un mundo mejor. Gentes, en su mayoría jóvenes, con distintos niveles de instrucción, que buscan un paraíso que parecen mostrar los medios y las redes sociales. La realidad creo que es distinta, menos ideal de lo que aparenta en las pantallas.

Una nueva avalancha de muchachos, terminada en catástrofe humanitaria, atravesaba en las primeras horas de este verano los límites entre los territorios marroquíes y español. Las consecuencias fueron nefastas. Según las ONG de la zona, son al menos 37 los muertos y decenas los heridos los que se produjeron en el nuevo intento en el que 133, de los dos millares que se propusieron pasar de un lado a otro, lo consiguieron. Lograron llegar a un territorio gobernado por leyes democráticas y unas presuntas comodidades no comparables con las de los países de procedencia. Pero el paraíso todavía estaba lejos. La tragedia se produce a los pocos días de la reapertura de relaciones entre Rabat y Madrid.

Las asociaciones de defensores de los Derechos Humanos marroquíes han denunciado el trato inhumano de las fuerzas del orden de su país, que según datos oficiales, sufrieron en la refriega con los migrantes varios muertos no confirmados y un centenar de heridos. Esta información parcial no explica con claridad la situación existente en las inmediaciones de la ciudad autónoma ni los traslados previos de agentes a la zona. Una policía considerada como de las más informadas del mundo (veamos los casos de espionaje Pegasus, entre otros), que conoce perfectamente los movimientos de las fuerzas del orden españolas, pero que aplica una ineficacia abrumadora en materia migratoria.

Esta situación no es nueva. Ya en tiempos de los monarcas y antecesores del actual rey de Marruecos la inteligencia del país era muy buena conocedora de la política española, utilizaba chantajes y aprovechaba vacíos legales para acosar las relaciones con España y Europa (detenciones de pesqueros, reclamaciones puramente propagandísticas, presunta apropiación de territorios saharauis…), así como coyunturas de crisis político/económicas para presentar reivindicaciones contra los intereses europeos. Siempre ha jugado como víctima aprovechando su cartel de país que salvaguarda la tendencia agitadora de las políticas religiosas radicales de sus vecinos del norte africano y el occidente asiático. Pero Marruecos está regido por una teocracia que disimula un régimen dependiente de la voluntad de una autarquía que responde a los intereses de los gendarmes mundiales.

Los regímenes democráticos son los grandes ausentes de todo el vasto y rico continente africano, lleno de casi imprescindibles y necesarias materias primas, de luchas étnicas y de intereses económicos, de residuales políticas coloniales, de gobiernos autoritarios y vacío de humanidad.

Publicado el domingo 26 de junio en LA NUEVA ESPAÑA

https://www.lne.es/opinion/2022/06/26/melilla-problematica-frontera-67676488.html

Invierno en España para ahorrar gas en Alemania

Una propuesta que se debate en la sociedad germana y en el Bundestag

04·06·22 | 04:01

Los políticos alemanes parece que están echando cuentas y estudian si la medida pudiera ser llevada a cabo. Y es que la propuesta de la presidenta de la Asociación de Agencias de Viajes Independientes de Alemania, Marina Linnhoff, no era tan curiosa como parecía a simple vista. “Viajar contra Putin es mejor que congelarse por culpa de Putin”, ha declarado Linnhoff al periódico “Rheinische Post”, que se publica en Dusseldorf desde hace 75 años, tras manifestar su propuesta de que los jubilados alemanes disfruten un invierno sin el frío que representarán las restricciones de gas que llegarán si finalmente el Gobierno alemán deja de comprar el gas ruso.

Marina Linnhoff propuso hace unos días que el Gobierno de Berlín ofrezca 500 euros en un bono a los jubilados para que viajen a España en invierno. Así ahorrarían el gas de la calefacción y, además, no dependerían del fluido ruso y no pagarían a Vladimir Putin.

El ejecutivo alemán por el momento no ha dicho claramente sobre si estudia la posibilidad de aplicar la medida el próximo invierno pero la propuesta ya corre por el Parlamento. A la presidenta del comité de turismo del Bundestag, Jana Schimke, en principio no le entusiasma porque el coste de la medida representaría un gasto de unos 10.000 millones de euros y no compensaría, no sería un posible ahorro en el consumo de gas.

El argumento de Marina Linnhoff es que si los jubilados pasan la estación fría en España –ella habla de los lugares favoritos de los alemanes, como Baleares o Canarias– disfrutarán de un clima mucho más agradable y no consumirán el gas del invasor/destructor ruso de Ucrania. La presidenta de las agencias independientes insiste en que tomen en serio su sugerencia de buscar climas más cálidos porque el ahorro de esa energía podría ser aprovechado por la industria y “tendría efectos positivos para el sector del turismo”. Cuestión que tendría repercusión en nuestro país y en nuestra comunidad.

Incentivar la estancia de alemanes en España promueve que muchos germanos terminen residiendo en nuestro país, ya sea como inquilinos o como propietarios de segundas residencias. La mitad de las viviendas que se vendieron en las islas Baleares el año pasado fueron a extranjeros, más de la mitad a alemanes. Y según algunas fuentes estudiosas del cambio climático la diferencia de tiempo atmosférico entre el Principado y las islas mediterráneas se ha reducido en gran medida, además de que el ambiente y paisaje astur se asemeja mucho al de bastantes territorios alemanes.

Medios germánicos señalan que la propuesta no ha dejado indiferente a nadie y tanto en la sociedad como en el mismo Gobierno han surgido voces que la defienden y también detractores. Las opiniones son muy variadas y algunas ya han pedido que se debata para resaltar públicamente las opiniones y las consideraciones económicas. El Ejecutivo presidido por el canciller Olaf Scholz no se ha pronunciado oficialmente sobre la cuestión pero está trabajando en elaborar un plan de emergencia para lograr la reducción del consumo, tanto en hogares como en industria.

Mientras, en el sur del continente se ve la medida positiva, que ayudaría al sector de muchas comunidades a desestacionalizar el turismo, rentabilizar viviendas y hostelería. Desde el punto de vista ecológico sería un punto en la lucha contra el cambio climático. El Consejo de Gobierno del Principado debería interesarse por la propuesta y tratar de incentivar la llegada de alemanes a nuestra tierra que dinamizaría la economía local, podría detener la caída de la población y atraer nuevas iniciativas.

Publicado en LA NUEVA ESPAÑA el sábado 4 de junio de 2022

http://www.lne.es/opinion/2022/06/04/invierno-espana-ahorrar-gas-alemania-66893647.html

El tamaño sí importa

La “reduflación” se abre camino en los mercados populares

08·04·22 | 

Los precios no engañan. Quien engaña es el tamaño. O la cantidad. Hace tiempo que funcionan comercios con precios más bajos de marcas conocidas por el gran público. La marca es correcta pero el tamaño o el peso está disimulado, no es el que piensa uno en un principio, en una primera mirada. Así, buscas un producto, miras el precio y te parece más barato que el del comercio que frecuentas. Pero puedes no darte cuenta de que el precio es menor porque el tamaño o el peso también es menor. Es lo que empieza a ser conocido como “reduflación”, digamos que la “tendencia” de ciertas empresas a disminuir o reducir el tamaño o la cantidad de determinados productos pero manteniendo el mismo precio.

La costumbre es mirar el precio –un 65% de los consumidores se fija más en los precios y las promociones y menos en otros detalles, según un estudio de Aecoc, la asociación de fabricantes y distribuidores–, también los ingredientes y si su composición es conveniente, saludable o perjudicial para tu organismo. Lo que muchos consumidores pueden pasar por alto con frecuencia es el precio por kilogramo, por litro o por tamaño. No lo especifican en algunos establecimientos y la primera impresión que uno se lleva si no comprueba este baremo suele ser penosa, porque no es lo que vio en su primera mirada.

En la etiqueta que figura en la estantería del comercio puede figurar el precio por unidad, por kilo, por litro o por tamaño. También puede mencionar el precio del producto sin especificar en el tamaño o peso a qué corresponde ese valor. En cumplimiento de las normas europeas las etiquetas deben especificar los datos correspondientes a su valor real. Es decir, no solamente el precio y procedencia del producto exhibido sino también su valor real: el precio del kilo, del litro o del tamaño estándar de la materia en venta. Por ejemplo, bajo el precio de un paquete de galletas ha de figurar el valor del kilogramo de esas mismas galletas. Porque el tamaño del paquete puede llevar a engaño. Unos cincuenta gramos en un kilo en ciertos productos pueden representar una diferencia notable de valor.

El envase puede ser el mismo aunque el producto interior sea diferente. Si el comprador se fía solamente por el envase puede resultar confundido. Si lleva más cantidad, la oferta se resalta; si lleva menos no. En el peso, número de unidades o cantidad líquida puede haber una disminución que no se comprueba en una primera vista. Y en artículos caros la confusión puede ser notable. Por consiguiente, lo que conviene es revisar no solamente el precio sino comprobar la cantidad contenida en el envase –950 gramos, por ejemplo, no son un kilo– y revisar el valor según el peso o la medida correspondiente. De este modo se comprueba lo que empieza a conocerse por reduflación.

El sistema ya se utiliza en algunos comercios especializados en precios bajos, ciertos establecimientos que no trabajan con menor margen de beneficio del que sería más habitual. Son tiendas que llenan sus estanterías de productos de marcas conocidas pero que suelen expender productos más baratos sin que el cliente vea a primera vista que el envase es un “pelín” más pequeño. El sistema es un reclamo para un comprador de última hora, sin tiempo para fijarse en el producto. Ante la tendencia detectada por Aecoc, de comprar menos o dirigirse a los productos de marca blanca, los fabricantes buscan una empatía para que el consumidor no abandone su marca, pero no anuncian las reducciones en las medidas.

La “reduflación” triunfa porque la mayoría –un 84%– de los productos de compra cotidiana, la carne y los pescados, las verduras y frutas, los lácteos, aceites y muchos artículos de higiene y limpieza, estudiados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) han subido en una media de más de un nueve por ciento respecto a hace un año. El dicho popular ya razonaba sobre el duro a cuatro pesetas.

Publicado el viernes 8 de abril de 2022 en LA NUEVA ESPAÑA

http://www.lne.es/opinion/2022/04/08/tamano-importa-64792430.html